Freibades de Hamburgo permanecen abiertos pese a la baja afluencia
Solo cinco días de buen tiempo han afectado la asistencia este verano. Las instalaciones mantienen horario habitual en vacaciones, pero con equipos reducidos. La empresa pública Bäderland confía en una mejora climática para agosto/septiembre.
«Saure-Gurken-Zeit»: temporada de vacas flacas
El portavoz Michael Dietel confirmó que «vienen apenas un puñado de nadadores» a los recintos al aire libre. Aunque las piscinas están prácticamente vacías, «tradicionalmente mantenemos apertura continua en verano», explicó. Los empleados han sido reubicados en piscinas cubiertas o realizan tareas de mantenimiento.
Impacto en la operativa
De los 13 complejos con áreas exteriores, solo seis operan todo el año. La asistencia en cubiertas también ha bajado por el periodo vacacional. Bäderland emplea a 550 trabajadores entre socorristas, técnicos y personal de mantenimiento.
Un julio gris que pide paciencia
Hamburgo registra un verano atípico con lluvias frecuentes y temperaturas bajo lo habitual. Dietel recordó que «los julios anteriores tampoco fueron especialmente soleados». La empresa espera recuperar visitantes si mejora el clima en las próximas semanas.
Mojarse… o no mojarse
La situación refleja la vulnerabilidad de los espacios acuáticos ante factores meteorológicos. Aunque la decisión de mantener abiertos los freibäder prioriza la continuidad del servicio, su rentabilidad dependerá de que agosto ofrezca condiciones más favorables.