Festival Wacken Open Air arranca entre barro y lluvia con 85.000 fans
El evento de heavy metal en Alemania enfrenta condiciones climáticas adversas. Desde el 30 de julio hasta el 2 de agosto, los asistentes disfrutan del concierto con Guns N’ Roses como cabeza de cartel, pese a las previsiones de lluvia intensa.
«Wackeeeen»: Metal, barro y cerveza
El festival en el pueblo de Wacken (Schleswig-Holstein) reúne a 85.000 asistentes con entradas agotadas desde septiembre. «Scheiß drauf, Wacken es solo una vez al año», cantan los fans, que llevan botas de goma y chubasqueros. El Deutsche Wetterdienst prevé lluvias persistentes hasta el sábado, lo que ha convertido el terreno en un lodazal.
Logística y sostenibilidad
Los organizadores reparten bolsas de basura negras (residuos) y amarillas (plásticos) para fomentar el reciclaje. La iniciativa #GreenWacken promueve la reducción de desechos, con contenedores especiales para colillas. El precio de la cerveza (0,4L) es de 5,80€, y la comida oscila entre 5,50€ (patatas fritas) y 11,50€ (pizza).
Seguridad y salud
La policía despliega «un operativo modesto para un evento de este tamaño», según un portavoz. En 2024, los servicios médicos atendieron 3.500 casos, desde picaduras de insectos hasta hospitalizaciones (200 traslados).
Un escenario que no se hunde
El W:O:A es un referente global del heavy metal desde 1990. Bandas como Rammstein o Gojira han actuado aquí, y este año Guns N’ Roses cierra su gira europea en el festival. El humorista Otto o el cantante Heino han participado en ediciones anteriores.
El metal no entiende de meteorología
Pese al barro y la lluvia, el ambiente es festivo. Los fans han comprado entradas por 333€ (más 33€ por vehículo), y el merchandising de chubasqueros (30€) y ponchos (12€) agota existencias. La organización confirma que el consumo de cerveza sigue siendo «tan alto como siempre».