Comandante Antonio López lideró la proclama libertaria de Tarvita en 1811
Documentos históricos revelan su papel clave en la independencia del Alto Perú. La «republiqueta de Tomina» operaba antes de la llegada de Padilla y Azurduy, coordinando con las fuerzas rioplatenses. Nuevos hallazgos en el Archivo de la Casa de la Libertad detallan su condena y destierro por la monarquía española.
«La defensa de la religión y la patria son sagradas»
La proclama del 13/12/1811, atribuida al Comandante Antonio López o al Coronel Jacinto Cueto, llamaba a los fronterizos de Tomina a unirse contra «el opresor extranjero». El texto, difundido en Tarvita, marcó un giro al abandonar los vivas a Fernando VII y exigir la creación de un nuevo Estado.
Organización y coordinación
López, hacendado y Alcalde Pedáneo desde 1807, dirigía grupos armados en El Salto junto a su hermano José Manuel López, Manuel Esteban Gonzales y Jorge Michel. Operaban en las Fronteras de Tomina y Pomabamba, apoyando al Primer Ejército Auxiliar de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Persecución realista
La Audiencia de Charcas lo procesó por «alta traición al Rey», acusándolo de retener fondos y liderar guerrillas. Condenado inicialmente a muerte en 1812, la sentencia fue conmutada a 8 años de destierro tras la revisión de la Real Audiencia.
Raíces de la rebelión
Tras la Revolución de Chuquisaca (1809) y la Batalla de Suipacha (1810), las elites locales del Alto Perú buscaron autonomía. La derrota del Primer Ejército Auxiliar en Guaqui (1811) aceleró la organización de movimientos como la «republiqueta de Tomina», que precedió a la llegada de Padilla y Azurduy en 1813.
Un legado documental
Los archivos prueban que López y sus aliados articularon un proyecto independentista antes de 1813, con conexiones directas con Castelli y Pueyrredón. La proclama de Tarvita es ahora considerada un hito en la lucha emancipadora hispanoamericana.