Bundeswehr moderniza sus bases en Renania-Palatinado con inversiones millonarias
El Ministerio de Defensa alemán destina más de 2.000 millones de euros a renovar instalaciones militares. Los proyectos incluyen modernización de cuarteles, un hospital central y adaptación para aviones de combate F-35A. La región alberga actualmente a 14.000 militares y 9.000 civiles.
«Renovación estratégica para la era moderna»
El ministro de Defensa, Boris Pistorius, impulsa la modernización de infraestructuras «olvidadas durante décadas». «Queremos más velocidad en las obras», declaró durante una visita a la base de Germersheim, donde se invertirán 100 millones de euros en nuevas instalaciones. La lista de proyectos pendientes incluye cocinas, armerías y sistemas de suministro.
Claves de la transformación
En Idar-Oberstein, la Escuela de Artillería recibirá 150 millones para renovar sus instalaciones de los años 60. Mientras, en Büchel, el aeropuerto militar se adapta para albergar los nuevos cazas F-35A, con un coste que ya supera los 2.000 millones (800 más de lo previsto). «Los plazos son ambiciosos, pero la OTAN puede contar con nosotros», afirmó un portavoz.
De cuarteles a barrios civiles
El proceso de conversión (reutilización de terrenos militares) avanza en Mainz, donde la antigua Generalfeldzeugmeister-Kaserne se transformará en un barrio residencial. Sin embargo, el Comando Regional asegura que no cerrarán más bases, aunque no descambian intercambios de ubicaciones.
Un legado de la Guerra Fría
Renania-Palatinado alberga 20 instalaciones militares históricas, muchas sin renovar desde los años 60. La región es clave para la defensa alemana, con el Hospital Central de la Bundeswehr en Coblenza (1.500 empleados) y la formación de soldados ucranianos en Idar-Oberstein desde 2022.
Preparados para los nuevos desafíos
Las reformas buscan hacer atractivo el servicio militar obligatorio recién reinstaurado. Germersheim sirve como modelo, con entrenamiento contra drones y equipos modernos. «La guerra en Ucrania demostró que necesitamos ventaja tecnológica», admitió un instructor. Los proyectos, algunos con plazo hasta 2040, marcan un cambio en la política de defensa alemana.