Bolivia importó 1.480 toneladas de mercurio en una década pese a su toxicidad
El 75% de indígenas evaluados supera los límites de mercurio en organismo. El metal, usado en minería aurífera, ingresa por vía legal e ilegal. Perú incautó 4 toneladas con destino a Bolivia la semana pasada.
El doble filo del oro: legalidad y contrabando
Bolivia importó 1.480 toneladas de mercurio entre 2013 y 2023, según el IBCE. Tayikistán, Rusia y China son los principales proveedores. Paralelamente, redes criminales traficaron 200 toneladas desde México hacia Bolivia, Colombia y Perú en seis años, revela la EIA. El mercurio es clave para extraer oro: se usan 0,4 kg por cada kg de oro en minería fluvial y hasta 5 kg en subterránea (Oxfam, 2024).
Producción aurífera en auge
La extracción de oro creció un 91% en 2022 (53,3 toneladas), impulsada por altos precios y políticas favorables. El 99,6% proviene de cooperativas, pero se estima que 40 toneladas anuales son ilegales, valoradas en 1.800 millones de dólares. Parte se legaliza mediante mecanismos opacos o se mezcla con oro peruano contrabandeado.
Amazonia en peligro: salud y medioambiente
La minería aurífera avanza en ríos amazónicos, áreas protegidas y territorios indígenas, con daños ambientales y violaciones de derechos. La OMS alerta que el mercurio afecta al sistema nervioso, pulmones y riñones. Un estudio en 36 comunidades indígenas mostró que el 75% supera el límite seguro de mercurio en cabello (1,0 ppm).
Un convenio sin dientes
Bolivia ratificó en 2015 el Convenio de Minamata para reducir el mercurio, pero no prohibió su comercialización. La importación legal continúa, y el contrabando persiste, como muestran las 4 toneladas incautadas en Perú el 24/07/2025.
El costo humano de la fiebre del oro
El mercurio contamina la cadena alimenticia y amenaza a poblaciones que dependen de ríos. El Estado enfrenta el desafío de equilibrar intereses mineros, salud pública y protección ambiental, en un sector dominado por cooperativas con subsidios estatales.