Kim Yo Jong rechaza diálogo con el nuevo presidente de Corea del Sur
La hermana de Kim Jong Un afirma que no tienen interés en negociar. La declaración, difundida por medios estatales norcoreanos, responde a los gestos de acercamiento del gobierno surcoreano. Corea del Norte prioriza su alianza con Rusia.
«Ni razón para reunirse ni temas que discutir»
Kim Yo Jong, figura clave en el régimen norcoreano, aseguró que su país no tiene interés en diálogos con Seúl, pese a los esfuerzos del presidente Lee Jae Myung, quien asumió en junio. «No importa qué propuesta hagan, no nos interesa», declaró en un comunicado oficial. Es la primera reacción norcoreana al nuevo gobierno surcoreano.
Gesto surcoreano sin reciprocidad
Lee Jae Myung había suspendido emisiones de propaganda mediante altavoces en la frontera y repatriado a norcoreanos que llegaron a territorio surcoreano. Kim Yo Jong reconoció estos pasos como «esfuerzos sinceros», pero los consideró insuficientes. Criticó la alianza militar de Seúl con EE.UU. y los ejercicios conjuntos previstos, que Pyongyang ve como «preparación para una invasión».
Prioridad: Moscú antes que Seúl
Corea del Norte ha centrado sus esfuerzos en fortalecer la cooperación con Rusia, enviando tropas y armamento convencional para apoyar su guerra en Ucrania. Expertos sugieren que esta dinámica podría cambiar si el conflicto ruso-ucraniano termina. Mientras, EE.UU. y Corea del Sur temen que Moscú comparta tecnología sensible para el programa nuclear norcoreano.
Unificación borrada de la agenda
En 2024, Kim Jong Un modificó la constitución para eliminar el objetivo de reunificación pacífica con el Sur y declararlo «enemigo principal invariable». Analistas interpretan esto como un intento de justificar el uso de armas nucleares contra Seúl y contener su influencia cultural. La medida rompió con la retórica tradicional norcoreana sobre la unidad peninsular.
Diplomacia congelada
Corea del Norte lleva años sin negociar con Seúl o Washington, tras el fracaso de las conversaciones nucleares con Donald Trump en 2019. Aunque Trump ha expresado interés en reanudar el diálogo, Pyongyang no ha respondido. La postura de Kim Yo Jong refuerza que la distensión no está en sus planes inmediatos.