Periodista boliviano relata secuestro exprés en México en 1998
Dos empresarios fueron retenidos y robados a punta de pistola en la Ciudad de México. El suceso ocurrió durante un viaje de trabajo tras ignorar recomendaciones de seguridad. El autor, abogado y testigo, narra con crudeza cómo escaparon de mayores daños físicos.
«Pavlov nos adiestró a golpes»
El relato detalla cómo dos asaltantes interceptaron su taxi Volkswagen («peta») en un semáforo. «Me retuvieron los lentes, decretando cerrar los ojos», describe. Cada intento de abrirlos se castigaba con un revés en el cachete. Los delincuentes viajaban acompañados por otro vehículo con cómplices.
Extorsión con «gradualismo»
Tras llevarlos a un barrio alejado, los atacantes usaron una máquina de electricidad y un martillo como amenaza. «Se preferiría el gradualismo al shock», ironiza el autor. Forzaron a revelar los NIP de sus tarjetas, aunque en un momento confundieron una falla técnica con resistencia.
De Trotsky a la cruda realidad
Horas antes, los protagonistas habían visitado la casa de León Trotsky en Coyoacán, donde un guía «melenas» mezclaba ideales revolucionarios con elogios al expresidente argentino Carlos Menem. La anécdota contrasta con el violento desenlace nocturno.
México: entre el turismo y la inseguridad
El texto evidencia la dualidad de la capital mexicana en los 90: sede de organismos como la OTI pero con zonas peligrosas. Los viajeros ignoraron la advertencia del hotel sobre taxis no autorizados, confiados por la seguridad que experimentaban en Bolivia.
Un final con CD y preguntas incómodas
Los asaltantes se interesaron por los discos de Steve Hackett y Oscar Peterson robados, e incluso preguntaron por el futbolista Marcelo «Diablo» Etcheverry. El episodio terminó sin daños mayores, pero dejó una lección sobre los riesgos de subestimar el contexto local.