Tarija celebra la centenaria fiesta infantil de Santa Anita
Niños y niñas protagonizan la tradición con venta de miniaturas. La festividad, originada en 1885, conmemora la fundación de la Escuela Santa Ana. Este año se extendió a dos días, según autoridades locales.
«Queremos preservar esta fiesta que es de los niños»
En la calle Cochabamba de Tarija, los pequeños expositores vendieron saicecito, ranguita y gelatinas en miniatura, vestidos como «chapaquitas». Violeta Rodríguez (10 años) y Diego Villa (11 años) destacaron entre los participantes. «Antes era un solo día, ahora son dos», explicó Daniela Vedia, madre de una de las niñas.
Apoyo institucional a la tradición
El alcalde Johnny Torres afirmó que «la niñez es protagonista de una tradición muy fuerte» y abogó por fortalecerla. Por su parte, el escritor René Aguilera recordó que el origen se remonta a 1885, cuando las monjas organizaron bazares con intercambio de miniaturas usando botones de concha, práctica que se perdió hacia 1920.
De la calle Cochabamba a toda la ciudad
La festividad, que inicialmente se concentraba en un solo lugar, ahora se expandió a barrios tarijeños y algunas provincias. Aguilera destacó su crecimiento, aunque lamentó la desaparición de elementos originales como el trueque con botones.
Una tradición que resiste al tiempo
La fiesta de Santa Anita nació como conmemoración del primer aniversario de la Escuela Santa Ana, organizada por monjas. Durante décadas, evolucionó de un juego infantil con botones a un evento consolidado que utiliza moneda corriente y atrae a familias enteras.
Santa Anita, patrimonio vivo de Tarija
La celebración mantiene su esencia como espacio dedicado a la niñez, pese a los cambios históricos. Su extensión a dos días y su expansión geográfica reflejan su vigencia como referente cultural de la región.