Stellantis, Ford y Volkswagen sufren fallos por correas bañadas en aceite
Cientos de miles de vehículos afectados por una tecnología defectuosa. La polémica afecta principalmente a Stellantis, mientras Ford y Volkswagen mitigaron los daños. El problema persiste en motores fabricados entre 2012 y 2023.
«Una solución teórica que se convirtió en pesadilla»
La correa de distribución bañada en aceite prometía eliminar mantenimientos y durar 240.000 km, pero su degradación prematura causó averías graves. «El aceite contaminado con combustible destruye la correa y obstruye el sistema», explica el informe. Stellantis la usó en la distribución principal, mientras Ford y Volkswagen la limitaron a funciones secundarias.
Las estrategias divergentes
Ford reemplazó discretamente las correas por cadenas en sus motores EcoBoost. Volkswagen solo las instaló en bombas de aceite de diésel. Stellantis, en cambio, «convirtió la tecnología en crítica para sus motores PureTech 1.0 y 1.2», lo que derivó en indemnizaciones y cambio de CEO.
Modelos y años bajo la lupa
Los vehículos más afectados son Citroën C3/C4, Peugeot 208/308/3008, Opel Corsa/Mokka y DS 3/7. Stellantis amplió garantías y ofrece reembolsos, pero recomienda verificar el código del motor (los seguros son EB2LTED o EB2LTEDH2).
Cuando la innovación no cumple
La industria buscaba reducir costes con sistemas «libres de mantenimiento». Stellantis asumió más riesgos al integrar la correa húmeda en componentes vitales, mientras sus competidores optaron por aplicaciones menos críticas o rectificaciones tempranas.
Un problema con consecuencias duraderas
El escándalo ha dañado la reputación de Stellantis y obligado a revisar masivamente vehículos. Aunque Ford y Volkswagen evitaron crisis similares, el caso expone los riesgos de tecnologías no suficientemente validadas.