China prioriza eficiencia en su red de alta velocidad tras alcanzar 48.000 km
El país asiático conecta ya el 97% de sus grandes ciudades con trenes rápidos. Tras años de expansión récord, ahora enfoca sus esfuerzos en mejorar logística, seguridad e integración multimodal. El Ministerio de Transporte busca optimizar la red operativa más grande del mundo.
De la cantidad a la calidad: el nuevo rumbo ferroviario
China ha pasado de añadir 10.000 km entre 2021-2024 a centrarse en «exprimir el potencial» de su infraestructura. Con 48.000 km operativos (70% del total mundial), el objetivo es alcanzar los 50.000 km antes de fin de 2025, según el gobierno. 2.240 millones de viajeros usaron el servicio en el primer semestre del año, pero las autoridades buscan mayor comodidad y coordinación con otros transportes.
Logística y competitividad
El plan incluye rutas adaptadas a mercancías y mejoras en conexiones con aeropuertos y puertos. «Lo que está en juego ya no es solo la movilidad, sino la competitividad del país», destaca el reporte. Paralelamente, se prueban trenes de levitación magnética de 600 km/h en ciudades como Qingdao.
Seguridad y planificación
La red ha operado sin accidentes graves desde 2012, según Xinhua. El éxito se atribuye a «decisiones centralizadas e inversión sostenida», aunque reconoce sobrecostes y errores. La prioridad ahora es precisión sobre expansión, especialmente en regiones interiores menos conectadas.
Una red que ya cambió el mapa
China construyó su sistema en tiempo récord, superando a potencias tradicionales. El modelo, con control estatal y metas claras, permitió conectar el 97% de ciudades con más de 500.000 habitantes. Hoy, el desafío es mantener su liderazgo con mejoras técnicas y operativas.
El futuro pasa por la integración
El gigante asiático demuestra que una red madura exige evolucionar: desde transporte de pasajeros hasta columna vertebral logística. Con proyectos experimentales y ajustes continuos, busca que su alta velocidad siga siendo referencia global en eficiencia y escala.