Dirigentes evistas rechazan llamado de Arce a unir a la izquierda electoral
Gladys Quispe tildó al presidente de «ladrón» del MAS. La fractura en el oficialismo se profundiza a tres semanas de los comicios. Arce busca convergencia ante el desplome de su candidato, que no supera el 3% en encuestas.
«¿Quién carajo es usted para llamar a la unidad?»
La jefa de bancada evista, Gladys Quispe, descalificó públicamente el pedido de Luis Arce: «Usted es un ladrón que se apropió del MAS». El presidente había convocado a una reunión este jueves con facciones disidentes, incluida la de Evo Morales, para evitar una «derrota electoral» el 17 de agosto.
Las cifras que alarman al arcisimo
Eduardo Del Castillo, candidato oficialista, ocupa el penúltimo lugar en preferencia electoral (3%), según cinco encuestas recientes. Los legisladores arcistas insisten en que solo una alianza podría movilizar al electorado indeciso, pero Morena y Alianza Popular ya descartaron sumarse al MAS.
La sombra de Evo Morales
Jorge Richter, exvocero de Arce y ahora candidato de Morena, acusó: «El presidente busca bloquear cualquier retorno político de Morales». Mientras, el exministro Félix Patzi (Alianza Popular) postergó su decisión sobre la reunión, pendiente de consultas internas. Se reveló que seis evistas figuran en listas de Morena.
Grietas en el instrumento político
El MAS llegará dividido en tres corrientes a los comicios: arcistas, evistas y disidentes que conformaron nuevos partidos. Esta fragmentación reproduce la pugna por el control del movimiento fundado por Morales en 1995, agudizada desde la ruptura pública entre Arce y el expresidente en 2023.
Sin puentes a tres semanas de la elección
El llamado a la unidad parece naufragar ante el rechazo abierto de los evistas y la desconfianza de las otras facciones. Los analistas anticipan que esta división beneficiará a fuerzas opositoras en un escenario donde ningún candidato oficialista logra capitalizar el electorado histórico del MAS.