Trump negocia la liberación de 14 presos políticos en Bielorrusia
Un enviado estadounidense logró la excarcelación tras reunirse con Lukashenko. La operación, mediada por diplomacia personal, incluyó a disidentes clave como Siarhei Tsikhanouski, esposo de la líder opositora exiliada. Ocurrió el 21 de junio cerca de la frontera con Lituania.
«President Trump me envió para liberaros»
El abogado John Coale, enviado especial de Trump, recibió a los prisioneros en un campo bielorruso tras años de encarcelamiento. «Estaban aterrorizados; costó que entendieran que eran libres», relató. Entre los liberados estaba el periodista Ihar Karnei y Tsikhanouski, detenido en 2020 por intentar competir contra Lukashenko.
Diplomacia con vodka
Coale describió su encuentro con Lukashenko en el Palacio de la Independencia en Minsk, donde «brindaron con vodka de la marca personal del dictador». El enviado destacó que el líder bielorruso busca acercarse a EE.UU., aunque sigue aliado con Putin. La liberación fue posible tras meses de negociaciones discretas.
Reacción de la oposición
Sviatlana Tsikhanouskaya, líder opositora en el exilio, recibió una llamada inesperada de su esposo: «Querida, soy libre». Ella calificó el hecho como «una oportunidad para que Trump demuestre su influencia en la región». Sin embargo, expertos como Artyom Shraibman (Carnegie) advierten que Bielorrusia sigue atada a Rusia.
Lukashenko, entre dos aguas
El régimen bielorruso ha usado históricamente a presos políticos como moneda de cambio. En 2015, liberaciones similares llevaron al levantamiento de sanciones occidentales. Desde 2020, más de 5.000 personas han sido encarceladas por motivos políticos, según la ONG Vyasna. Lukashenko ahora busca relevancia en las negociaciones sobre Ucrania.
Un respiro en medio de la represión
La liberación, aunque limitada, marca un hito para activistas y familiares. 1.150 presos políticos siguen en cárceles bielorrusas, pero el gesto refleja la estrategia de Trump de priorizar la liberación de detenidos. Coale ya planea nuevas gestiones: «No me importa la geopolítica, solo liberar gente».