La ONU acusa a Israel de disparar contra civiles que buscaban ayuda en Gaza
Al menos 67 personas murieron en un ataque durante la distribución de alimentos. El WFP denuncia que las víctimas intentaban acceder a un convoy humanitario. Israel alega que respondió a una «amenaza inmediata».
«Disparos contra quienes buscaban comida para no morir de hambre»
El Programa Mundial de Alimentos (WFP) informó que un convoy de 25 camiones con ayuda para el norte de Gaza fue atacado este domingo al cruzar el paso de Zikim. «La multitud que esperaba alimentos recibió fuego israelí», señaló la ONU en redes sociales. Según la autoridad sanitaria controlada por Hamás, hubo 67 fallecidos y heridos graves.
Las versiones enfrentadas
El ejército israelí admitió disparos de advertencia para «neutralizar una amenaza», pero negó la cifra de víctimas. El diario Times of Israel indicó que no se confirmó si los atacantes fueron solo tropas israelíes o también grupos armados.
La desesperación de Gaza alcanza niveles críticos
El WFP subrayó que la población «está al borde de la inanición» y criticó que el ataque ocurrió pese a garantías de Israel de facilitar la ayuda. La ONU denuncia que el nuevo sistema de distribución, gestionado por la Gaza Humanitarian Foundation (GHF), expone a los civiles a riesgos. Antes del conflicto, existían 400 centros de ayuda; ahora, la mayoría no opera por restricciones israelíes.
Un mecanismo de ayuda bajo sospecha
Israel implementó la GHF para evitar el desvío de suministros por Hamás, pero la ONU cuestiona su eficacia. Los incidentes mortales cerca de sus centros son recurrentes. El WFP alertó que este episodio refleja el «creciente peligro» para las operaciones humanitarias.
Gaza, entre la guerra y el hambre
El territorio sufre una crisis alimentaria agravada por el bloqueo y los combates. La ONU lleva meses advirtiendo sobre el colapso de servicios básicos y la escasez extrema de suministros.
La ayuda humanitaria, en riesgo constante
El incidente evidencia las dificultades para asistir a 2 millones de palestinos. Mientras Israel prioriza controles de seguridad, las organizaciones internacionales exigen acceso sin restricciones para evitar más tragedias.