Estados Unidos libera a 10 presos en Venezuela mediante intercambio con El Salvador
Venezolanos deportados desde EE.UU. a El Salvador serán enviados a su país. El acuerdo, anunciado por Nayib Bukele, incluye la liberación de estadounidenses detenidos en Venezuela y presos políticos venezolanos. La operación se cerró este viernes tras meses de negociaciones.
«Un camino hacia la libertad»
El secretario de Estado Marco Rubio confirmó que 10 ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela «están en camino a la libertad». Agradeció a Bukele por facilitar su liberación, parte de un intercambio que también incluye a venezolanos acusados de pertenecer a la organización criminal Tren de Aragua.
Detalles del acuerdo
Bukele explicó que aprobó la liberación de «todos los venezolanos detenidos en El Salvador» a cambio de presos políticos venezolanos y la liberación de los estadounidenses. Los deportados estaban recluidos en CECOT, una mega-prisión para criminales peligrosos.
Antecedentes polémicos
En marzo, el gobierno de Trump deportó a decenas de venezolanos a El Salvador bajo el Acta de Extranjeros Enemigos, una medida declarada ilegal en junio por un juez federal. Entre los afectados estaba Kilmar Abrego, un salvadoreño deportado por error y devuelto a EE.UU. en junio.
Incógnitas pendientes
No está claro el destino de Daniel Lozano, otro venezolano deportado, protegido por un acuerdo legal que impedía su expulsión. Su caso sigue en litigio, al igual que las demandas por violaciones al debido proceso presentadas por otros detenidos.
Negociaciones en la sombra
Tres fuentes anónimas revelaron que EE.UU. propuso este intercambio en mayo, usando al encargado de negocios en Bogotá como intermediario. Venezuela prefirió tratar con el enviado especial Richard Grenell, lo que ralentizó las conversaciones.
Un capítulo que no cierra del todo
El acuerdo resuelve casos puntuales, pero deja abiertas cuestiones legales sobre deportaciones a terceros países. Mientras, el gobierno de Trump mantiene su política de expulsiones cuando el país de origen no acepta a los deportados.