Estados Unidos impulsa leyes para proteger datos de políticos tras asesinato
Al menos 12 estados proponen ocultar información personal de legisladores. La medida, motivada por el crimen de una exdirigente en Minnesota, genera debate entre seguridad y transparencia. Organizaciones periodísticas alertan sobre riesgos para la rendición de cuentas.
«Protección vs. transparencia: el dilema postatentado»
El asesinato en junio de la ex presidenta de la Cámara de Minnesota, Melissa Hortman, y el ataque al senador John Hoffman aceleraron iniciativas legales en Florida, Oregón y otros 10 estados. «Es una respuesta al horror de Minnesota», admitió el republicano Christopher DePhillips, promotor de una ley similar en Nueva Jersey.
Detalles de las propuestas
Los proyectos buscan eliminar direcciones, historiales patrimoniales y viajes privados de registros públicos. En Oregón, el senador James Manning logró aprobar una norma que protege datos hasta de miembros de juntas escolares. «Publicar direcciones debería ser un delito», declaró Manning, quien vivió amenazas en 2023.
Críticas desde la prensa
La ACLU y el Comité de Reporteros por la Libertad de Prensa (RCFP) advierten que ocultar datos dificultará investigar corrupción. La abogada CJ Griffin señaló que «sin acceso a transacciones inmobiliarias, se podrían encubrir sobornos». Ambos grupos rechazaron entrevistas para este reporte.
Violencia política: el detonante
El ataque a Hortman se suma a otros episodios recientes: el complot para secuestrar a la gobernadora de Michigan (2020), un incendio en la residencia del mandatario de Pensilvania (abril 2025) y el atentado contra Donald Trump (julio 2024). La polarización y ataques a funcionarios crecieron un 40% desde 2020, según datos citados en el texto.
¿Equilibrio posible?
Mientras estados como Oregón mantienen opciones limitadas para acceder a datos vía solicitudes (FOIA), críticos proponen alternativas: mejorar tecnología de seguridad o coordinación con policía local. DePhillips aseguró estar abierto a negociar con la ACLU, pero defendió ocultar detalles como «el número de apartamento» de un legislador.