El Rimac Nevera R bate récords de velocidad pero fracasa en ventas
El hiperdeportivo eléctrico alcanzó 431,45 km/h, pero solo venderá 40 unidades. A pesar de su exclusividad y potencia récord, los compradores adinerados prefieren motores de combustión. La marca croata admite que no fabricará otro modelo eléctrico a corto plazo.
«Récords en pista, decepción en ventas»
El Rimac Nevera R ha marcado un hito al convertirse en el coche eléctrico más rápido del mundo, superando los 431 km/h. Sin embargo, «el mercado de hiperdeportivos eléctricos es muy limitado», reconoció Mate Rimac, CEO de la marca. Solo se fabricarán 40 unidades, a 2,3 millones de euros cada una, pero la demanda no alcanza las expectativas.
La paradoja tecnológica
Mientras aficionados celebran sus avances, los millonarios rechazan el modelo por preferir motores de combustión. Incluso en el Nürburgring, fue superado por el Xiaomi SU7 Ultra, un rival menos especializado. Rimac admite que «es poco probable que repitamos con otro eléctrico pronto».
Presión desde Porsche
La marca alemana, dueña del 20% de Rimac, registró un desplome del 46% en beneficios (182 millones de euros) por las bajas ventas. Hasta mayo de 2024, solo se entregaron 50 unidades del Nevera original, de las 150 previstas.
Un mercado que no electriza
Los hiperdeportivos eléctricos enfrentan una barrera cultural: los compradores de alto poder adquisitivo buscan el sonido y la emoción de los motores tradicionales. Aunque el Nevera R ofrece 2.017 CV, su atractivo comercial no convence.
Rápido, exclusivo… pero sin compradores
El futuro inmediato de los hiperdeportivos eléctricos parece incierto. Rimac ha demostrado capacidad técnica, pero la rentabilidad depende de un mercado que aún no apuesta por la electrificación en este segmento.