Restricciones a coches diésel con pegatina B en España son mínimas en 2025
Solo Segovia y algunas ciudades aplican limitaciones significativas. La mayoría de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) permiten el acceso a estos vehículos si estacionan en aparcamientos. La normativa actual afecta principalmente a diésel de más de 10 años y gasolina de más de 19.
«Prohibiciones anunciadas, pero casi inexistentes»
Pese a la alarma en redes, solo Segovia, Madrid, Barcelona y algunas ciudades pequeñas tienen restricciones activas para coches con etiqueta B. En Madrid, estos vehículos pueden circular pero deben aparcar en parkings dentro del centro. Barcelona permite su circulación sin límites hasta 2026, cuando empezarán a aplicarse restricciones solo en episodios de alta contaminación.
Excepciones y zonas reducidas
Ciudades como Salamanca limitan el acceso a áreas mínimas (0,37 km²), mientras que otras como Bilbao o Getafe exigen estacionar en parkings. San Sebastián será la más restrictiva a partir de 2028, prohibiendo totalmente la entrada a estos vehículos en su ZBE de 1,2 km².
Un panorama fragmentado y poco restrictivo
La falta de directrices claras del Gobierno ha llevado a que muchas ciudades eviten restricciones duras. Ejemplos como Ciudad Real planean ZBE donde todos los coches, incluso sin etiqueta, podrán circular. Otras, como Málaga, retrasan las limitaciones hasta 2028.
De la polémica a la realidad
La DGT clasificó los vehículos con pegatina B por antigüedad (diésel matriculados entre 2006-2014 y gasolina entre 2000-2006), generando críticas por discriminar más a los diésel. Pese a ello, la aplicación real de restricciones sigue siendo minoritaria.
Conducción (casi) sin obstáculos
Las limitaciones actuales son escasas y localizadas, con excepciones que permiten el uso práctico de estos vehículos. El impacto real para los conductores será mínimo hasta al menos 2026-2028, cuando algunas ciudades endurezcan sus normas.