Descubren que restos de 1874 pertenecen al mayor barco vikingo de Noruega
El Myklebust medía 30 metros y fue cremado en un ritual funerario real. Hallado en un túmulo en 1874, su reconstrucción navega hoy gracias a 7.000 remaches y 44 escudos encontrados. El museo Sagastad exhibe una réplica funcional desde 2019.
«Un gigante oculto en remaches oxidados»
El arqueólogo Anders Lorange descubrió en 1874 los restos del Myklebust en la granja homónima (oeste de Noruega). Los 7.000 remaches y 44 umbos (centros de escudo) hallados revelaron un drakkar de 30 metros, el más grande del país. «Su cremación señala que perteneció a un rey, quizá Audbjørn de los fiordos», explica el estudio.
Reconstruyendo un símbolo de poder
El Sagastad Viking Center completó en 2019 una réplica navegable del barco. Cada primavera, el drakkar recorre fiordos noruegos, reviviendo su leyenda. Nuevos hallazgos en 2024 (como un anillo de bronce) podrían modificar su diseño actual.
Barcos que definieron una era
Los drakkars como el Myklebust combinaban velocidad, capacidad de carga y maniobrabilidad. Eran claves en incursiones vikingas, con proas de dragón para intimidar. Su uso en rituales funerarios (poco común) subrayaba el estatus del difunto.
De túmulo a museo
La Era Vikinga (siglos VIII-XI) dejó barcos emblemáticos, pero el Myklebust pasó desapercibido por su mal estado inicial. Hoy, su reconstrucción acerca al público la tecnología naval vikinga, confirmando su superioridad marítima.
Un legado que sigue a flote
El Myklebust simboliza el ingenio vikingo y su conexión con el mar. Su resurrección museística permite estudiar y celebrar una pieza clave de la historia noruega, mientras nuevas excavaciones podrían ampliar su historia.