Príncipe saudí alquila superyate de lujo para vacaciones en Grecia
Muqrin bin Abdulaziz viajó con más de 100 personas y alquiló un yate-hotel con 246 tripulantes. El expríncipe heredero de Arabia Saudita desembarcó en Corfú tras alquilar el Evrima, un barco de 190 metros con 149 suites, ya que su yate privado resultó insuficiente.
«Un hotel flotante para un séquito real»
El príncipe Muqrin, hermano del rey Salman, llegó a Grecia en su Boeing 747 privado con un séquito de más de 100 personas. Aunque posee el yate Solandge (valorado en 150 millones de dólares), optó por alquilar el Evrima de Ritz Carlton, que ofrece «privacidad y servicios de cinco estrellas». El yate, construido en astilleros españoles en 2022, tiene capacidad para 298 huéspedes pero fue reservado en exclusiva.
Lujo extremo en alta mar
El Evrima cuenta con 149 suites con terrazas, cinco restaurantes gourmet, spa, gimnasio y piscina infinita. La tripulación de 246 personas garantiza un ratio de casi 2.5 empleados por invitado, «uno de los más altos en la industria náutica», según Ritz Carlton. El grupo navega por Corfú sin otros pasajeros a bordo.
Antecedentes: El estilo de vida de la realeza saudí
La familia real saudí es conocida por sus despliegues de lujo en viajes. En 2025, este viaje se suma a otros como el del exemir de Catar, que requirió nueve aviones para una evacuación médica. El Evrima, parte de una flota hotelera, suele alquilarse por entre 6.900 y 11.300 euros por persona, pero Muqrin lo reservó íntegramente.
Vacaciones bajo el radar (imposible)
Aunque el príncipe mantiene un perfil bajo, la logística de su viaje —desde el convoy en tierra hasta el yate— lo hace visible. El recorrido por aguas griegas evidencia el poderío económico de la familia real, que prioriza comodidad y exclusividad incluso en vacaciones.