Vecinos de Madrid sufren cortes y atascos por el soterramiento de la A-5
80.000 vehículos diarios afectados por las obras que durarán al menos 25 meses. Los municipios aledaños reportan fallos en servicios básicos y colapso en el tráfico desde mayo de 2025.
«Un pequeño infierno» para los barrios colindantes
Los vecinos de Aluche, Batán y Pozuelo han sufrido cortes de luz, agua e Internet en los últimos dos meses debido a daños en infraestructuras durante las obras. Iberdrola y Movistar han registrado averías recurrentes, con afectaciones a miles de abonados. «El firme está destrozado y los atascos son diarios», señala el reporte.
El colapso del tráfico
La reducción a dos carriles operativos ha desviado el flujo vehicular a calles adyacentes y municipios como Alcorcón o Móstoles. Los vecinos exigen habilitar los terrenos militares de Cuatro Vientos como aparcamientos disuasorios para aliviar la congestión.
Repercusión metropolitana
La ampliación de 700 metros en el tramo de obras (hasta la M-40) ha extendido los problemas a conductores y transportes públicos. Autobuses que entraban por la A-5 ahora descargan pasajeros en Cuatro Vientos, generando caos inicial.
De autopista a parque: el precedente de Madrid Río
El proyecto promete replicar el éxito del soterramiento de la M-30, que creó 120 hectáreas verdes y revalorizó viviendas. Sin embargo, los beneficios llegarán tras 25 meses de obras, según el plan inicial.
Paciencia a prueba de martillos
Los inconvenientes actuales contrastan con la promesa de mejora en movilidad y calidad de vida. Mientras, los vecinos enfrentan un impacto directo en servicios esenciales y desplazamientos, con soluciones temporales como repartos de agua embotellada.