China domina cinco industrias clave con estrategia estatal
Controla hasta el 90% de procesamiento de tierras raras y lidera baterías, acero, barcos y energía eólica. Su plan «Made in China 2025» impulsó esta hegemonía mediante subsidios y bajos costes, generando tensiones comerciales globales.
«De mineros a dueños de la cadena tecnológica»
China pasó de ser proveedor de materias primas en los 80 a controlar el 60% de la extracción y 90% del procesamiento de tierras raras, esenciales para electrónica y energías verdes. «El Medio Oriente tiene petróleo, nosotros tenemos tierras raras», citan a Deng Xiaoping (1987). Hoy usan este poder como arma en guerras comerciales.
Cinco sectores bajo dominio chino
1. Antibióticos: Producen el 80% del Amoxicillin global. La pandemia reveló la dependencia mundial cuando China redujo exportaciones. 2. Baterías: Fabrican el 70% mundial, con un 90% del grafito refinado. «De 300 startups de coches eléctricos solo sobreviven 50», afirma el CEO de Xpeng. 3. Acero: Producen 1.000 millones de toneladas anuales (mitad del total mundial). 4. Barcos: De 5% en 2000 a 50% del mercado actual. 5. Energía eólica: Instalaron 80 gigavatios en 2024 (dos tercios del total global).
El motor: subsidios y crisis ajena
La estrategia combinó inversión estatal masiva (como en el plan Made in China 2025) con ventajas competitivas: salarios bajos, estándares ambientales flexibles y crisis de competidores. Ejemplos: Northvolt (Suecia) quebró, y la coreana LG Energy Solution perderá 65% de cuota en Europa en cinco años.
Cuando el crecimiento choca con límites
El modelo enfrenta desafíos: saturación en construcción (colapso inmobiliario en 2023) y exceso de producción (exportaciones de acero subieron 30% en 2024). La UE y EE.UU. responden con aranceles, pero China ya controla cadenas completas, como la logística marítima a través de COSCO (1.500 barcos y puertos como Hamburgo).
Viento a favor… y en contra
Mientras Europa intenta proteger su industria eólica (advierten sobre un «efecto fotovoltaico», donde China copó el mercado), sus turbinas son 50% más baratas y llegan a 8 países europeos. El patrón se repite: dominio local primero, expansión global después.
Un futuro moldeado desde Pekín
La dependencia global de China en sectores estratégicos es irreversible a corto plazo. Su éxito radica en integrar cada eslabón (extracción, procesamiento, manufactura y logística), aunque el exceso de capacidad y las tensiones geopolíticas marcarán sus próximos movimientos.