Waltz promete reformar la ONU con recortes y críticas

El nominado embajador de EE.UU. ante la ONU, Mike Waltz, propone recortes de fondos y reformas para la organización, criticando su gestión y politización.
POLITICO

Waltz promete reformar la ONU con recortes de fondos y críticas a su gestión

El nominado embajador de EE.UU. ante la ONU cuestiona su financiación y acusa a la organización de antisemitismo. Mike Waltz, exasesor de seguridad nacional de Trump, testificó ante el Senado el 15 de julio de 2025. Propone reducir aportes económicos y eliminar agencias «innecesarias».

«La ONU ha perdido su rumbo»

Waltz afirmó que la organización «se ha desviado de su misión original de paz» tras 80 años de existencia. Criticó su «politización radical», citando informes sobre racismo en EE.UU. y despojos a nativos americanos. «Debe ser un espacio neutral para el diálogo», declaró durante su audiencia en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.

Recortes y presión financiera

EE.UU., que aporta más del 25% del presupuesto de la ONU, planea retener 1.000 millones de dólares como parte de un paquete de ajuste. Waltz defendió usar este poder como palanca: «Las reformas solo ocurren cuando condicionamos el financiamiento». La ONU ya enfrenta una crisis económica profunda.

Enfrentamiento con China y antisemitismo

El nominado prometió contener la influencia china en el organismo y denunció resoluciones «desproporcionadas» contra Israel. Acusó a la agencia de ayuda palestina (UNRWA) de tener vínculos con Hamas y pidió «desmantelarla y transferir sus funciones».

Un legado de tensiones

La administración Trump ha criticado repetidamente a la ONU desde 2017, acusándola de burocracia e ineficacia. Waltz, exmilitar y congresista, hereda este enfoque, aunque sin detallar un plan concreto de reforma. Su nominación llega tras el retiro de Elise Stefanik para preservar la mayoría republicana en la Cámara.

¿Reforma o desmantelamiento?

El futuro de la ONU dependerá de la votación del Senado sobre los recortes y la capacidad de Waltz para negociar cambios. Los demócratas cuestionan cómo reducir fondos sin perder influencia, mientras la organización enfrenta desafíos globales crecientes.