Trump cambia de estrategia y aumenta presión militar a Rusia
El presidente estadounidense anunció envío «masivo» de armas a Ucrania. Rectifica su enfoque inicial de presionar solo a Kiev, tras el avance ruso. El giro busca equilibrar su postura, aunque sin priorizar una victoria ucraniana.
De presionar a Kiev a armar a Ucrania
Trump «corrige su propio error» tras meses de exigir concesiones a Ucrania y acercarse a Putin. Según analistas, su visión inicial «veía a Kiev como una carga financiera», lo que incentivó la escalada rusa. Ahora, el envío de armamento busca «desbaratar el cálculo de Moscú», aunque difiere del enfoque de Biden.
El precio del giro estratégico
El cambio llega tras críticas por su «táctica desbalanceada». Mientras antes buscaba «terminar el conflicto rápido» (incluso presionando a Zelenski), ahora prioriza contener a Rusia. Sin embargo, insiste en que su objetivo «no es la victoria ucraniana», sino un reajuste táctico.
Putin pierde la iniciativa
La medida sorprende al Kremlin, que había intensificado ataques aprovechando la postura inicial de Trump. Expertos señalan que «Moscú ya no cuenta con ventaja unilateral», aunque el apoyo estadounidense sigue siendo condicionado.
De la mano tendida a los misiles
Trump pasó de reunirse con Putin en febrero a autorizar armamento pesado en julio. El texto destaca que, pese al giro, mantiene su esencia: «No es un aliado incondicional de Kiev», sino que actúa por interés estratégico.
Un conflicto que redefine alianzas
La guerra en Ucrania sigue siendo el eje de tensiones globales, con EE.UU. y la UE realineando posturas. El viraje de Trump refleja que incluso visiones «pragmáticas» deben adaptarse a realidades militares.
El tablero se recompone, pero no se resetea
El impacto inmediato es frenar el avance ruso, aunque sin alterar el objetivo final de Trump: negociar desde una posición reforzada. La clave será si este equilibrio logra estabilizar el frente o prolonga el conflicto.