Senado de EE.UU. aprueba recortar 9.000 millones a ayuda exterior y medios públicos
Dos republicanos rompieron filas para oponerse a la propuesta de Trump. El paquete de ajustes, el primero en 35 años, pasó por 51-48 y ahora vuelve a la Cámara Baja. La Casa Blanca eliminó cortes a programas contra el sida para lograr apoyo.
«Un paso en la dirección correcta»
El líder republicano John Thune defendió el recorte como «una décima parte del 1% del gasto federal», aunque admitió su carácter simbólico. El paquete final eliminó 400 millones en fondos para PEPFAR, el programa global contra el VIH/sida, tras presiones internas. La administración prometió proteger también ayuda alimentaria y salud materna.
Disidencias en el Partido Republicano
Las senadoras Lisa Murkowski (Alaska) y Susan Collins (Maine) votaron en contra, uniéndose a los demócratas. Collins criticó que «nadie sabe realmente qué programas se reducen» por falta de transparencia de la Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB). Roger Wicker (Mississippi) apoyó el plan «con reservas», advirtiendo: «Si vuelven a plantear esto, denos detalles concretos».
Presiones políticas y amenazas veladas
Trump había amenazado con retirar su apoyo electoral a republicanos disidentes. El director de OMB, Russ Vought, había sugerido incluso desafiar la Ley de Control de Embargos de 1974, que limita los recortes ejecutivos al gasto ya aprobado. Los demócratas, liderados por Chuck Schumer, acusaron a los republicanos de «ponerse una venda en los ojos» para complacer al presidente.
Un precedente con 35 años de historia
El último paquete de rescisiones aprobado por el Senado data de 1990. En 2018, los republicanos bloquearon una propuesta de Trump de 15.000 millones, con Collins y el entonces senador Richard Burr (Carolina del Norte) en contra. Esta vez, pese a las divisiones, el partido logró evitar un fracaso como el de hace siete años.
Un pulso que puede costar cooperación futura
Demócratas advirtieron que esta votación partidista dificultará acuerdos presupuestarios. Chris Murphy (Connecticut) señaló que su partido podría usar tácticas similares si recupera el control: «Los demócratas os lo harán cuando volvamos a mandar». El impacto real de los recortes se evaluará tras su implementación.