EEUU destruye 500 toneladas de alimentos para niños tras cerrar USAID
Las raciones, valoradas en 680.000 euros, se quemarán tras vencer su caducidad. Ocurre después de que el gobierno de Trump clausurara la agencia de ayuda internacional el 1 de julio. Los alimentos estaban destinados a Afganistán y Pakistán.
«Una decisión que indigna al mundo»
El subsecretario de Estado Michael Rigas confirmó ante el Senado que 500 toneladas de galletas energéticas serán incineradas en Dubái. «No tengo una buena explicación», admitió, calificando el hecho como «desconcertante». El demócrata Tim Kaine denunció que el gobierno prefirió dejar caducar la ayuda en lugar de distribuirla.
Coste económico y humano
Según The Atlantic, EEUU gastó 800.000 dólares en adquirir estos alimentos bajo la administración Biden, y ahora destinará 130.000 dólares adicionales a su destrucción. Las galletas, diseñadas para combatir la desnutrición infantil, pertenecían a programas cancelados por Trump en enero tras recortar el 80% del presupuesto de USAID.
Olas de protesta internacional
Organizaciones humanitarias calificaron la medida de «despilfarro intolerable». La polémica se agrava porque Afganistán enfrenta actualmente una crisis alimentaria severa. Rigas reconoció que no se exploraron alternativas para donar los suministros antes de su caducidad.
Cuando la política corta el plato
USAID, creada en 1961, era la principal herramienta de ayuda exterior de EEUU hasta su cierre definitivo el 1 de julio. Trump justificó los recortes como parte de su política de «América primero», pese a las críticas por el impacto en países dependientes de esta asistencia.
Un final previsible para lo impensable
El incidente refleja las consecuencias prácticas de la retirada estadounidense de la cooperación global. Mientras los alimentos se destruyen, los países beneficiarios deberán buscar alternativas en un contexto de reducción de ayuda internacional.