Chasqui traslada Tea de Murillo para conmemorar los 216 años del grito libertario de La Paz
Un mensajero simbólico recorrió 55 km desde Tiwanaku hasta El Alto. La ceremonia recreó la gesta de Pedro Domingo Murillo contra el dominio español en 1809. El acto culminó con el encendido de la antorcha en el Faro Murillo.
«El mensaje de Murillo es ser libres en todo sentido»
El chasqui, figura histórica del incario, partió al amanecer desde Tiwanaku acompañado por el alcalde local. Portó la tea hasta Radio San Gabriel y luego al Faro Murillo, donde se izó la bandera y autoridades rindieron homenaje. «Recordamos la rebelión del 16 de julio de 1809», destacó Herlan Cabrera, secretario Municipal de Desarrollo Humano.
Detalles del recorrido
La ruta emuló el sistema de correos incaico, uniendo simbólicamente el pasado precolombino con la independencia. El punto final fue el monumento al protomártir Murillo, líder de la sublevación contra España durante las fiestas de la Virgen del Carmen.
Raíces de una rebelión
La Paz conmemora cada 16 de julio la insurrección de 1809, cuando Murillo y otros rebeldes desafíaron el colonialismo. El acto con la tea busca vincular esa lucha con la identidad indígena anterior a la conquista, representada por el chasqui.
Una antorcha que sigue encendida
El ritual refuerza el valor histórico de la gesta paceña, mezclando tradiciones indígenas y criollas. Las celebraciones incluyeron verbena popular y ofrendas florales, según el boletín del GAMEA.