Piel artificial detecta calor y cortes con un solo material
Investigadores británicos desarrollan una membrana flexible con 32 electrodos. La tecnología, presentada el 15 de julio de 2025, permite a robots y prótesis sentir estímulos como humanos. Usa hidrogel e inteligencia artificial para interpretar millones de datos.
«Un guante sensorial para máquinas»
Científicos de la Universidad de Cambridge y el University College London crearon una piel artificial que detecta temperatura, presión, cortes y múltiples toques simultáneos. «Basta fundirla y moldearla como un guante», explica el equipo en Science Robotics. La clave está en un hidrogel conductor combinado con tomografía por impedancia eléctrica (EIT).
Precisión y adaptabilidad
En pruebas con una mano robótica, el sistema identificó estímulos con 25 milímetros de precisión usando solo 32 electrodos en la muñeca. Registró desde el contacto humano hasta cambios de temperatura (19-25°C) y humedad (38-72%). El aprendizaje automático procesa 1,7 millones de canales de datos sin sensores distribuidos.
De la ciencia ficción a las prótesis
El diseño, libre de componentes rígidos, se integra en prótesis, ropa técnica o robots colaborativos. Supera limitaciones de pieles anteriores al centralizar la sensibilidad en una capa única. Aunque no iguala la piel humana, acerca a los robots a «sentir el entorno», destaca la Universidad de Cambridge.
Un camino de capas
Precedentes como pieles sintéticas que replican dolor o se autorreparan pavimentaron esta investigación. La novedad radica en su simplicidad radical: una membrana blanda que interpreta estímulos mediante software, sin mecánica interna.
Robots que «palpan» el futuro
La tecnología promete aplicaciones en rehabilitación, exploración remota y automoción. Pese a desafíos como mejorar la resolución en zonas alejadas de los electrodos, marca un hito hacia robots con sensibilidad física. Aún dista del realismo de la ficción, pero acerca la interacción máquina-entorno a niveles sin precedentes.