Ministro de Minería advierte crisis por escasez de combustibles en Bolivia
Alejandro Santos culpa al Legislativo por bloquear créditos clave para importar carburantes. Las filas en surtidores superan las 10 horas y el transporte opera al 30%. La crisis se agudiza en un contexto electoral y de falta de divisas.
«Sin combustible nadie se mueve»
El ministro de Minería, Alejandro Santos, alertó que el bloqueo parlamentario a créditos internacionales impide normalizar el suministro de diésel y GLP. «Las filas aumentan porque los créditos duermen años en el Parlamento», denunció. YPFB apenas cubre la demanda mínima, con colas de hasta 10 horas en La Paz, El Alto, Cochabamba y Santa Cruz.
Un problema estructural
Santos admitió que «estamos fregados» y criticó la lentitud de las soluciones: «Hacer la gestión no es de la noche al amanecer». Pidió a futuros candidatos presidenciales «soluciones estructurales» para un nuevo pacto energético, en referencia a las elecciones de agosto.
Impacto en el transporte y la economía
El transporte interdepartamental opera al 20-30% de su capacidad, con suspensiones de rutas y protestas de pasajeros. Analistas señalan que el modelo de subvención estatal está al límite, lo que podría derivar en parálisis productiva si no se reestructura el sistema.
Un modelo al borde del colapso
Bolivia enfrenta una crisis crónica por falta de divisas y créditos externos paralizados. La subvención a combustibles, sostenida por el Estado, ya no es viable sin reformas. La situación se agrava en un año electoral, con presión social creciente.
Elecciones y futuro energético
La advertencia del ministro pone el foco en la urgencia de decisiones políticas. La crisis de combustibles podría definir agendas electorales y exigir ajustes al modelo energético nacional en los próximos meses.