La UGR paraliza temporalmente su grado en Inteligencia Artificial
La Universidad de Granada (UGR) no podrá impartir el grado en IA este curso tras un informe desfavorable de la ACCUA. Más de 1.100 alumnos preinscritos deberán buscar alternativas. La Junta de Andalucía asegura que reactivará el programa si se cumplen los requisitos.
«Un freno a la apuesta tecnológica de Granada»
La UGR presentó en septiembre de 2024 la solicitud para el Grado en Ciencias de Datos e Inteligencia Artificial, compartido con Melilla, con inicio previsto para 2026. «Es un golpe temporal, pero no definitivo», afirmó el rector Pedro Mercado. La ACCUA, agencia evaluadora andaluza, rechazó la propuesta por no cumplir los estándares del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
El proceso truncado
El informe negativo de la ACCUA —primero que recibe la UGR— obliga a modificar el plan de estudios. Juanma Moreno, presidente de la Junta, prometió agilizar los trámites si se rectifican los fallos. Mientras, los alumnos afectados deberán optar por otras titulaciones.
España corre contra el reloj para formar expertos en IA
El país necesita cubrir 4.000 puestos vacantes en IA y ciencia de datos. Según Amparo Alonso, ex presidenta de la Asociación Española de IA, la clave está en enseñar «los fundamentos científicos, no solo herramientas actuales». Solo cinco universidades públicas, como la Politécnica de Valencia o la de Málaga, ofrecen grados similares.
Andalucía, en busca del hub tecnológico
La Junta impulsa desde hace años proyectos como el Parque Tecnológico de Andalucía en Málaga o la atracción de empresas como Vodafone. El grado de la UGR era parte de esta estrategia, que incluye titulaciones en IA en Jaén y Almería. Granada aspiraba a sumarse con su propio programa.
La carrera continúa
La UGR tiene ahora la oportunidad de reajustar su propuesta para obtener el visto bueno. El retraso, aunque significativo, no descarta que Granada logre posicionarse como referente en formación tecnológica. La demanda de profesionales en IA sigue creciendo, y las universidades son clave para cubrirla.