Trump investiga a Powell por sobrecostos en sede de la FED
La Casa Blanca examina un proyecto de renovación de 2.500 millones de dólares. El escrutinio reaviva rumores sobre un posible despido del presidente de la Reserva Federal, pese a que Trump negó planes de removerlo. La FED defiende su independencia frente a presiones políticas.
«Un ataque directo a la independencia de la FED»
El director de Presupuesto, Russ Vought, lidera la investigación sobre supuestas irregularidades en la remodelación de la sede en Washington. Acusa a Powell de «mala gestión fundamental» y de cambiar su testimonio ante el Congreso. «Buscan construir un caso por incumplimiento de normas federales», analiza Karen Petrou de Federal Financial Analytics.
La batalla por las tasas de interés
Trump insiste en que la FED debería recortar tasas y ha sugerido que Powell «renuncie inmediatamente» si mintió al Congreso. Sin embargo, un funcionario anónimo aclaró que la investigación por sobrecostos es independiente de las críticas a la política monetaria.
Repercusión en Wall Street
Analistas advierten que cualquier intento de destitución generaría turbulencias en los mercados. Rebecca Patterson, del Council on Foreign Relations, lo califica como «un hecho sin precedentes que pondría en duda la independencia de una institución clave».
Detalles del proyecto bajo la lupa
La renovación incluye dos edificios y busca consolidar espacios para reducir alquileres externos. Senadores republicanos cuestionaron supuestos gastos suntuarios, como salones VIP o colmenas en la azotea, lo que Powell negó rotundamente. La FED atribuye los sobrecostos a retrasos, remoción de asbesto y presiones inflacionarias.
Una relación en picada
Trump nominó a Powell en 2017, pero su relación se deterioró por desacuerdos en política monetaria. La Corte Suprema ha señalado que el presidente no puede despedir libremente a funcionarios de la FED, pero una causal como mala gestión administrativa abriría una puerta legal.
¿Presión o pretexto?
Expertos como Scott Alvarez, exabogado de la FED, dudan que se pueda justificar un despido «con causa». Consideran la investigación «una estrategia para forzar bajas de tasas o forzar la renuncia de Powell», en un contexto donde la inflación sigue siendo prioridad para la Reserva Federal.