Francia investiga a X por manipulación de algoritmos e injerencia extranjera
La fiscalía francesa acusa a la plataforma de Elon Musk de alterar sus sistemas para distorsionar el debate democrático. La investigación, iniciada el 9 de julio de 2025, surge tras denuncias por difusión de contenido racista y homófobo. Es el último episodio de la presión regulatoria europea contra X.
«Contenido que envenena el debate público»
La magistrada Laure Beccuau confirmó que la investigación penal se centra en posible manipulación algorítmica y extracción fraudulenta de datos. Las denuncias provienen de un legislador y un alto funcionario anónimo. «El contenido difundido busca sesgar el proceso democrático en Francia», señala el escrito inicial de enero.
El detonante: odio y política
La queja original acusaba a X de amplificar «cantidades masivas de mensajes políticos racistas, anti-LGBT+ y homófobos». Este caso se suma a otra reclamación parlamentaria contra Grok, el chatbot de X, por publicar posts antisemitas.
Europa aprieta las tuercas
La Comisión Europea investiga a X desde 2023 por incumplir la Ley de Servicios Digitales (DSA). En enero amplió el caso a sus algoritmos, tras una entrevista de Musk con la líder ultraderechista alemana Alice Weidel. Francia y la UE exigen acelerar las conclusiones.
Una plataforma en el ojo del huracán
X acumula conflictos legales en Europa por moderación de contenido y transparencia algorítmica. La DSA obliga a las grandes plataformas a evitar riesgos sistémicos, como la desinformación o el discurso de odio.
El futuro se decide en los tribunales
El caso francés podría sentar precedentes sobre responsabilidad penal por manipulación tecnológica. Paralelamente, la investigación de la UE definirá los límites de la autorregulación de las redes sociales en el bloque.