BYD sorprende a Toyota con su rápido crecimiento en coches eléctricos

BYD podría convertirse en el quinto fabricante mundial de vehículos en 2025, dejando atónitos a empleados de Toyota por su agilidad en producción y decisiones.
xataka.com

BYD asombra a Toyota con su rápido crecimiento en coches eléctricos

La firma china podría convertirse en el quinto fabricante mundial de vehículos en 2025. Según Reuters, empleados de Toyota admiten estar «atónitos» por la agilidad de BYD en producción y toma de decisiones. La alianza entre ambas desde 2020 ha acelerado el desarrollo de modelos eléctricos.

«Una bolsa llena de lecciones»

Dos empleados de Toyota describieron a Reuters su sorpresa ante la velocidad con que BYD implementa cambios, frente a los largos procesos de prueba nipones. Mientras Toyota analiza seis prototipos durante miles de kilómetros, la china «aprueba y aplica modificaciones en tiempo récord». Aun así, Toyota mantiene su protocolo para garantizar fiabilidad.

Modelos conjuntos y éxito parcial

Fruto de su colaboración, lanzaron el Toyota bZ3 en China, con aceptación discreta. Sin embargo, el bZ3X recibió 10.000 reservas en una hora. Ambos preparan más lanzamientos para 2025, como el bZ5 y bZ7. BYD, que solo vende híbridos y eléctricos, aprovecha su eficiencia en materiales como plásticos para reducir costes.

El contraste de dos filosofías

Mientras Toyota prioriza el «kaizen» (mejora continua meticulosa), BYD y otras marcas chinas optimizan tiempos y costes con procesos ágiles. Reuters destaca que empresas como Zeekr (de Geely) ya advirtieron sobre el exceso de recursos que emplean los japoneses en componentes innecesarios para vehículos eléctricos.

De alumnos a competidores

La alianza comenzó en 2020, cuando Toyota buscó apoyo en BYD para electrificarse. Cinco años después, la china supera en ritmo y adaptación al gigante japonés, aunque este mantiene su enfoque conservador. El mercado chino, el más competitivo en eléctricos, ha sido el campo de prueba.

Un futuro acelerado

El crecimiento de BYD refleja la pujanza china en movilidad eléctrica, donde la rapidez y la reducción de costes marcan la diferencia. Toyota, aunque impresionada, sigue priorizando la fiabilidad sobre la velocidad. La evolución de esta alianza definirá estrategias en la industria.