China lidera la energía nuclear con reactor de torio y sales fundidas
El país asiático opera ya 58 reactores, destacando el TMSR-LF1, pionero en tecnología de cuarta generación. Su avance coloca a China por delante de EEUU y Rusia en innovación nuclear, según datos oficiales.
«De dos reactores a la vanguardia tecnológica en 20 años»
China ha pasado de tener dos centrales nucleares en 2002 a 58 en 2025, según el texto. El hito clave es el reactor TMSR-LF1, ubicado en Gansu, que opera con torio y sales fundidas desde octubre de 2023. Este modelo es más seguro y eficiente que los convencionales, al evitar riesgos de fusión del núcleo y generar menos residuos.
Ventajas del reactor de torio
El TMSR-LF1 utiliza torio, un elemento tres veces más abundante que el uranio, según el artículo. Además, puede funcionar en zonas áridas al no requerir agua para refrigeración. China planea construir otro reactor similar para 2030, aunque países como India o EEUU también investigan esta tecnología.
De la Guerra Fría a la autosuficiencia nuclear
El programa nuclear chino comenzó en los años 50 con apoyo soviético, pero Mao impulsó la autonomía tras la ruptura en 1959. La primera central 100% china, Qinshan, se conectó en 1991. La lenta evolución inicial contrasta con el crecimiento acelerado de las últimas décadas, que sitúa a China solo por detrás de EEUU en número de reactores.
Un futuro enterrado (literalmente)
La tecnología de sales fundidas permite instalar reactores bajo tierra, aumentando su seguridad. Además, los residuos radiactivos se desintegran más rápido que los del uranio. Para China, esto supone una oportunidad para expandir la energía nuclear a regiones remotas, reduciendo su dependencia de combustibles fósiles.