Inundaciones en Texas dejan más de 100 muertos por falta de preparación
El recorte de fondos federales para desastres agrava la vulnerabilidad ante el cambio climático. Las lluvias extremas en el condado de Kerr superaron las previsiones, mientras la administración Trump reduce programas clave de alerta temprana. Expertos vinculan el evento al calentamiento global.
«Era evitable»: fallos en un sistema bajo recortes
El condado de Kerr, Texas, descartó en 2017 instalar un sistema de alerta de inundaciones por su alto costo (1 millón de dólares), según informes locales. «Esa cantidad de víctimas no era necesaria», afirmó Michael Coen, exjefe de personal de FEMA. El sistema habría activado sirenas durante la alerta de inundación emitida a la 1:14 a.m. del 4 de julio.
El papel de la administración Trump
La Casa Blanca negó que los recortes a NOAA (2.200 millones de dólares en 2026) y la eliminación de programas como Building Resilient Infrastructure and Communities afectaran la respuesta. Sin embargo, expertos como David Maurstad, exdirector del Programa Nacional de Seguros contra Inundaciones, advirtieron: «No se puede ignorar la evidencia científica que vincula estos eventos al cambio climático».
Ciencia versus negacionismo
Estudios de World Weather Attribution y ClimaMeter confirmaron que el calentamiento global aumentó las precipitaciones entre un 7% y un 20%. Friederike Otto, climatóloga del Imperial College de Londres, subrayó: «Las lluvias extremas son precisamente lo que la ciencia predice en un mundo que se calienta rápidamente».
Repercusión local
El juez del condado, Rob Kelly, declaró a CBS News: «No teníamos motivos para esperar algo así». Pese a ello, Kerr County tiene un historial de inundaciones desde hace 150 años en el río Guadalupe. Los daños económicos superan los 18.000 millones de dólares, según AccuWeather.
FEMA, en la cuerda floja
Trump anunció en enero que evaluaba eliminar la agencia, principal respondedora ante desastres. Chad Berginnis, de la Asociación de Gestores de Inundaciones, denunció que «los programas clave para financiar sistemas de alerta están siendo recortados». La Casa Blanca respondió que trabaja con los estados para «identificar proyectos que mejoren la resiliencia».
Un pasado que se repite
Kerr County rechazó el sistema de alerta en 2017 tras no obtener subsidios federales. Timon McPhearson, experto del IPCC, comparó el caso con los incendios de Hawái en 2023, donde tampoco se activaron alarmas. La falta de inversión en prevención expone a comunidades con recursos limitados, como Kerr (presupuesto anual: 67 millones de dólares).
Lecciones pendientes
La tragedia evidencia la brecha entre la ciencia climática y las políticas de preparación. Mientras la administración Trump prioriza recortes, expertos insisten en que sin sistemas de alerta y reubicación de zonas vulnerables, eventos como este seguirán cobrando vidas. La eficacia de la respuesta federal en Texas marcará el debate sobre el futuro de FEMA.