Campamento en Texas evacúa a 70 personas antes de inundación mortal
El personal actuó sin alerta oficial y salvó vidas. Las lluvias torrenciales causaron al menos 79 muertos en la zona. El campamento Mo-Ranch evitó la tragedia al reubicar a niños y adultos en terreno elevado.
«Vimos el peligro y actuamos»
Aroldo Barrera, gestor del campamento, alertó a su equipo al ver el río Guadalupe crecer durante la madrugada del 4 de julio. Tim Huchton, presidente de Mo-Ranch, coordinó la evacuación de 70 personas de un edificio cercano al río. «Los ayudaron a empacar y los llevaron a terreno seguro», explicó Lisa Winters, directora de comunicaciones.
Falta de alertas oficiales
Las autoridades locales no emitieron advertencias pese a las previsiones de lluvias extremas. Winters afirmó que el campamento «no recibió información directa del condado». Mientras Mo-Ranch se salvó, otros lugares como el Camp Mystic reportan 10 niñas desaparecidas.
«Los edificios no importan, las vidas sí»
El campamento sufrió daños menores, pero Winters destacó: «No puedo imaginar perder niños». Mostró una kayak retorcida como prueba de la fuerza del agua. Mo-Ranch permanece cerrado y colabora con otros centros afectados. «Somos una hermandad de campamentos», dijo emocionada.
Una tragedia anunciada
La zona registró lluvias equivalentes a meses en pocas horas. Las autoridades admiten que no anticiparon la magnitud del desastre. Residentes y campamentos critican la falta de alertas tempranas.
Solidaridad en medio del caos
La rápida acción de Mo-Ranch evitó víctimas, pero la región enfrenta una crisis humanitaria. Equipos de rescate buscan a desaparecidos mientras los sobrevivientes reciben ayuda. La prioridad sigue siendo localizar a las 10 niñas del Camp Mystic.