TSE proyecta más de 7,3 millones de electores para elecciones judiciales

El padrón electoral biométrico superará los 7,3 millones de habilitados, con 178.973 nuevos votantes. Analistas exigen transparencia en el crecimiento del registro.
El Deber

TSE proyecta más de 7,3 millones de electores para elecciones judiciales

El padrón electoral biométrico se actualizará el 12 de julio. El registro incluye 178.973 nuevos votantes y 55.376 residentes en el exterior. Analistas exigen transparencia en el crecimiento del padrón.

«Un padrón confiable requiere vocales creíbles»

El Servicio de Registro Cívico (SERECI) entregará al Tribunal Supremo Electoral (TSE) el padrón oficial, que superará los 7,3 millones de habilitados para las elecciones judiciales. Franco Gamboa, sociólogo, advirtió que «la confiabilidad técnica del padrón depende de la credibilidad de los vocales del TSE», tras años de cuestionamientos al sistema.

Detalles del empadronamiento

El último proceso masivo registró 596.118 personas: 417.135 actualizaron domicilio y 178.973 son nuevos votantes. Fabian Yaksic, especialista en autonomías, subrayó que «el incremento debe justificarse para evitar susceptibilidades», mientras Marcelo Silva, politólogo, alertó sobre «discrepancias con la realidad poblacional».

La sombra del censo y las cifras cuestionadas

José Luis Santistevan, abogado constitucionalista, señaló que los datos del INE «distorsionan el padrón» por fallas en el Censo Nacional. «En Bolivia los votantes llegan al 66%, cifra atípica en la región», atribuyéndolo a errores en proyecciones poblacionales, especialmente en Santa Cruz.

De 5,1 a 7,3 millones en 16 años

El padrón creció un 42% desde 2009 (5,1 millones) hasta 2020 (7,3 millones). En 2019 alcanzó 7.315.364 electores, con un aumento sostenido pero criticado por falta de correlación con datos censales.

Transparencia bajo la lupa

La entrega del padrón marca el inicio oficial del proceso electoral, con énfasis en auditar el crecimiento de votantes. Los analistas coinciden en que la credibilidad del TSE y la justificación técnica serán clave para legitimar los resultados.