Evo Morales admite su inhabilitación electoral y alerta sobre abstención masiva
Más de 2 millones de votantes podrían no participar en los comicios. El expresidente denunció presiones del Gobierno para excluirlo. La decisión se confirmó el 3 de julio, tras un cambio de postura de un partido no identificado.
«Nos liquidaron como candidatos por órdenes de Arce»
Evo Morales reveló que recibió una llamada a las 2:00 AM del 3 de julio ratificando su candidatura, pero «a la 1 de la tarde cambiaron de decisión». Aseguró que el presidente Luis Arce, desde Argentina, presionó para vetarlo: «Llamaba permanentemente para decir que no podía ir Evo». La inhabilitación afecta a las elecciones del 17 de agosto.
Repercusión en el electorado
Morales advirtió que la exclusión generará una abstención de más de 2 millones de personas, principalmente en su base de apoyo. Calificó el hecho como «una vulneración al derecho de elegir y ser elegido». Hasta la semana pasada, sus asesores aún confiaban en un acuerdo con un partido.
Respuesta política
El expresidente anunció un ampliado nacional en Lauca Ñ el próximo fin de semana para analizar su inhabilitación y la situación económica. El encuentro debatirá «cómo defender Bolivia» y enfrentar lo que considera «políticas del imperio». No detalló las medidas concretas que adoptarán.
De la esperanza a la exclusión
Morales buscaba competir por cuarta vez como candidato presidencial, pese a controversias legales previas. Su movimiento mantiene influencia en sectores rurales y sindicales, pero enfrenta tensiones con el oficialismo desde 2020. La inhabilitación profundiza la fractura en el oficialismo.
Un proceso electoral bajo sombras
La denuncia de Morales pone en duda la neutralidad del proceso electoral. La abstención masiva que anticipa podría alterar los resultados y aumentar la polarización. El ampliado en Lauca Ñ marcará el rumdo de su movimiento en este escenario.