Pentágono revisa unilateralmente pacto AUKUS bajo la administración Trump
El Departamento de Defensa impulsó una evaluación sin consultar a aliados o agencias clave. La medida, liderada por Elbridge Colby, busca alinear el acuerdo de submarinos nucleares con la agenda «America First». Revela disfunciones en el Consejo de Seguridad Nacional (NSC), reducido a menos de 100 miembros bajo Marco Rubio.
«Juego de tronos» en la seguridad nacional
La revisión del pacto AUKUS (Australia, Reino Unido y EE.UU.) sorprendió a funcionarios del Departamento de Estado y aliados internacionales. Tres fuentes describieron el hecho como un ejemplo de la «fragmentación» en el NSC, donde Rubio ha eliminado reuniones clave y centralizado decisiones. La Casa Blanca defiende los cambios para priorizar «operaciones seguras y evitar filtraciones».
Un NSC reducido y reactivo
Rubio recortó más de la mitad del personal y restringió los comités de coordinación (PCC), que antes prevenían crisis menores. Ahora solo se discuten temas prioritarios para Trump, como la guerra Israel-Irán, en reuniones reducidas con sus asesores más cercanos. Funcionarios temen que «la falta de diálogo genere crisis imprevistas», desde pandemias hasta amenazas terroristas.
Antecedentes: Un NSC en la mira
Trump siempre desconfió del NSC tras testimonios en su primer impeachment. Rubio, como secretario de Estado, buscó devolver protagonismo al Departamento de Estado. Biden también centralizó decisiones en el NSC, generando roces. La actual administración ve al Consejo como un «instrumento ejecutor» de ideas presidenciales, no como coordinador interagencial.
Prueba de fuego para AUKUS
El resultado de la revisión mostrará si el Pentágono coordina con otras agencias o repite acciones unilaterales. Expertos citan los aranceles de Trump como ejemplo de políticas no consensuadas que contradicen otros objetivos, como aumentar el gasto militar aliado. La eficacia del NSC dependerá de equilibrar prioridades presidenciales con mecanismos de prevención.