Piloto transgénero demanda a influenciador por difamación tras choque aéreo
Jo Ellis, piloto de la Guardia Nacional, fue falsamente acusada en redes de causar un accidente que mató a 67 personas. La desinformación se viralizó tras un decreto de Trump que prohibía a personas transgénero servir en el ejército. Ellis presentó una demanda por daños a su reputación y seguridad.
«Me desperté con cientos de mensajes de odio»
El 31 de enero, Jo Ellis descubrió que Matt Wallace, influenciador de derecha con 2.3 millones de seguidores, la señaló como responsable del choque entre un helicóptero Blackhawk y un avión comercial en Washington DC. La acusación falsa se basó en un ensayo que Ellis había escrito sobre ser piloto transgénero. «Temí por mi vida y la de mi familia», relató Ellis, quien tuvo que publicar un video para demostrar que estaba viva.
La maquinaria de desinformación
Wallace afirmó en X que el accidente pudo ser «un ataque terrorista trans», publicación vista 4.8 millones de veces. Incluso el chatbot Grok de X repitió la falsedad. Según el grupo GLAAD, los ataques contra personas trans aumentaron un 14% en el último año, con 26 agresiones físicas y un fallecido registrados entre mayo de 2024 y 2025.
Un patrón peligroso
Investigadores documentaron 12 casos desde 2022 donde personas transgénero fueron falsamente vinculadas a tragedias. Kayla Gogarty de Media Matters señaló que «esto forma parte de una campaña para deshumanizar a la comunidad trans». Ejemplos incluyen tiroteos en Wisconsin (2024) y Minnesota (2025), donde figuras como Donald Trump Jr. culparon sin pruebas al «movimiento transgénero radical».
De anónima a protagonista involuntaria
Ellis, que antes tenía baja presencia en redes, ahora es reconocida en público y porta un arma por seguridad. Su demanda contra Wallace busca sentar un precedente similar al caso de Alex Jones, condenado por difamación tras el tiroteo de Sandy Hook. El Equality Legal Action Fund, que representa a Ellis, maneja otros tres casos de difamación contra personas LGBTQ+.
El cierre de un capítulo amargo
La viralización de falsedades evidencia cómo plataformas como X y Facebook han reducido sus filtros contra discursos de odio. Ellis, ahora activista, insiste en que «la libertad de expresión no debe dañar a otros». Su caso refleja el impacto real de la desinformación: desde amenazas de muerte hasta el endurecimiento de leyes anti-trans en 116 estados de EE.UU.