TSE impone controles estrictos para la impresión de papeletas electorales
8,4 millones de papeletas deberán cumplir con medidas de seguridad avanzadas. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) supervisará todo el proceso con fiscales designados. La empresa adjudicataria enfrenta requisitos técnicos y de confidencialidad sin precedentes.
«Un proceso blindado desde el diseño hasta la destrucción»
El TSE exige que las papeletas sean impresas en papel bond de 90 gramos con tintas fluorescentes, códigos QR y microtexto. «La computadora de diseño no tendrá internet ni dispositivos externos permitidos», señala una de las normas. Los fiscales del TSE controlarán cada etapa, incluida la destrucción final de materiales.
Medidas de seguridad extremas
La empresa deberá aislar el área de diseño, prohibir celulares y memorias USB, y garantizar equipos de emergencia. Los fiscales autorizarán la impresión masiva solo tras aprobar muestras. Además, la empresa debe alojar y alimentar al personal de seguridad adicional asignado por el TSE.
Responsabilidades y sanciones
Todo el personal involucrado portará identificaciones visibles, y la empresa destruirá bajo supervisión los materiales sobrantes o defectuosos. Incumplir la confidencialidad del proceso acarreará sanciones no especificadas en el contrato.
Elecciones bajo lupa
El TSE busca garantizar transparencia en los comicios de 2025 tras polémicas anteriores por inhabilitaciones de candidatos. Las papeletas incluirán a 10 partidos, aunque Fuerza del Pueblo no reemplazó a su vicepresidencial inhabilitado, generando tensiones.
Un desafío logístico y técnico
El éxito del proceso dependerá de la capacidad operativa de la empresa adjudicataria y la coordinación con los fiscales. Las papeletas, con tres diseños distintos, deberán estar listas para su distribución en los plazos electorales.