CIA confirma que EEUU destruyó instalación nuclear clave de Irán
La instalación era esencial para la metalización de uranio enriquecido. El ataque, realizado con bombas antibúnker y misiles, habría retrasado el programa nuclear iraní «durante años», según el director de la CIA. El gobierno de Trump insiste en que las ambiciones atómicas de Teherán quedaron «arrasadas».
«Un golpe monumental al programa nuclear»
El director de la CIA, John Ratcliffe, informó al Congreso de EEUU que la única instalación de conversión de metal de Irán fue destruida en los ataques militares estadounidenses. Según un funcionario anónimo, esta planta en Isfahan era crítica para fabricar el núcleo de una bomba atómica. «Sin ella, Irán no puede avanzar en su programa nuclear a corto plazo», afirmó.
Daños y capacidades residuales
Rafael Grossi, jefe del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), advirtió que aunque las instalaciones de Fordow, Natanz e Isfahan sufrieron «daños severos», no fueron totalmente eliminadas. «Si Irán lo desea, podría reiniciar actividades», señaló, aunque subrayó que la metalización de uranio —proceso clave— está ahora bloqueada.
Postura de EEUU e Israel
El presidente Donald Trump calificó el ataque como «demoledor», mientras Israel aseguró que el programa nuclear iraní quedó retrasado «por muchos años». El secretario de Estado Marco Rubio afirmó que la instalación de Isfahan «está borrada del mapa». Sin embargo, el informe preliminar de la Agencia de Inteligencia de Defensa reconoce que no hubo destrucción total.
Antecedentes: Una escalada con raíces profundas
El ataque se enmarca en la tensión histórica entre EEUU e Irán por el programa nuclear, que Teherán insiste es pacífico. Los bombardeos —precedidos por ataques israelíes— buscaban neutralizar capacidades críticas, como la metalización de uranio, tras el fracaso de acuerdos diplomáticos. Irán mantiene conocimiento técnico, pero su infraestructura está severamente dañada.
Cierre: Un freno temporal, pero no definitivo
La destrucción de la instalación de Isfahan frena temporalmente la capacidad iraní para desarrollar armas nucleares, según EEUU. Sin embargo, expertos como Grossi recuerdan que el conocimiento técnico persiste, y la reconstrucción —aunque lenta— es posible. La comunidad internacional sigue pendiente de que Irán permita inspecciones independientes para evaluar el daño real.