Estudiante boliviana viajará al Polo Norte en rompehielos nuclear

Valeria Gutiérrez, de 14 años, fue seleccionada entre 70.000 jóvenes para una expedición científica al Ártico organizada por Rosatom.
Opinión Bolivia

Estudiante boliviana de 14 años viajará al Polo Norte en rompehielos nuclear

Valeria Gutiérrez fue seleccionada entre 70.000 jóvenes de 21 países. La cochabambina participará en una expedición científica organizada por la corporación rusa Rosatom en agosto de 2025. Es la única representante de Bolivia en este programa educativo.

«Una travesía para fomentar la ciencia en jóvenes»

Valeria Yorley Gutiérrez, estudiante del Colegio Adventista Sarmiento de Cochabamba, viajará al Ártico en el rompehielos nuclear ’50 Let Pobedy’. El proyecto, que conmemora los 80 años de la industria nuclear rusa, busca impulsar el interés por disciplinas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) en adolescentes. «Es una bendición que me impulsa a seguir soñando en grande», declaró la joven.

Un riguroso proceso de selección

El concurso internacional «Rompehielos del Conocimiento» incluyó tres fases: un cuestionario científico, seminarios sobre tecnología nuclear y la presentación de un video con propuestas innovadoras. Valeria destacó por su creatividad y claridad, superando a participantes de China, India, Brasil y otros 18 países. Los ganadores fueron anunciados el 20 de junio en el Museo Atom de Moscú.

Experiencia educativa en el Ártico

Durante la expedición, los 65 seleccionados interactuarán con científicos y observarán el impacto del cambio climático. La ruta también celebrará los 500 años de exploración de la Ruta Marítima del Norte. Rosatom, organizador del evento, promueve así vocaciones tecnológicas con impacto global.

De Cochabamba al mundo

El logro de Valeria resalta el papel de la educación adventista en Bolivia, que combina formación científica y valores. Su participación posiciona al país en un escenario internacional de innovación, junto a potencias como Rusia o China.

Un viaje que inspira

La expedición de agosto 2025 demostrará cómo programas globales pueden abrir oportunidades únicas a jóvenes talentos. Para Bolivia, representa un hito en visibilidad educativa y científica, sin requerir inversión estatal.