Cuentas de políticos fallecidos siguen activas en redes

Perfiles de congresistas difuntos publican contenido automático o gestionado por familiares, generando riesgos de seguridad digital y vacíos legales.
POLITICO

Cuentas de políticos fallecidos siguen activas en redes sociales

Perfiles de congresistas difuntos publican contenido automático o gestionado por familiares. La ausencia de protocolos oficiales genera situaciones incómodas y riesgos de seguridad digital. Casos recientes incluyen a tres legisladores estadounidenses cuyas cuentas interactuaron tras su muerte.

«Me gusta» desde el más allá

La cuenta de la fallecida congresista Sheila Jackson Lee (demócrata de Texas) dio «me gusta» a una publicación sobre las primarias de Nueva York en junio de 2025, once meses después de su muerte. El hecho fue denunciado por la cuenta «Dear White Staffers», que cuestionó la actividad fantasma.

Publicaciones programadas sin control

El representante Sylvester Turner (también demócrata de Texas) cambió su foto de perfil en X tres semanas después de morir en marzo de 2025. Su cuenta saludó el #OpeningDay de la MLB con un mensaje automático que incluía el hashtag #NewProfilePic, provocando reacciones de usuarios que lo calificaron de «macabro».

Endosos post mórtem y vacíos legales

El exrepresentante Gerry Connolly (demócrata de Virginia) mantuvo actividad en sus cuentas políticas tras fallecer en mayo de 2025. Sus redes promocionaron votaciones anticipadas para elegir a su sucesor y enviaron correos pidiendo apoyo a su exjefe de gabinete, aunque su campaña negó manejar esos contenidos.

Familias asumen el control

Los perfiles de Connolly y Turner aclaran ahora que son gestionados por sus familias. Un caso similar ocurrió en 2020 con Herman Cain, cuyo perfil fue rebautizado como «Cain Gang» por sus herederos para seguir publicando contenido político.

Cuando la tecnología sobrevive a las personas

El Congreso estadounidense carece de protocolos para gestionar cuentas digitales de legisladores fallecidos. Zack Brown, exdirector de comunicaciones del difunto representante Don Young, reveló que «nadie reclama el acceso a los perfiles» y alertó sobre riesgos de seguridad, ya que exmiembros del equipo técnico conservan capacidad de publicar como si fueran el difunto.

El legado digital queda en tierra de nadie

La falta de regulación permite que cuentas oficiales sigan activas sin supervisión, generando confusión entre ciudadanos. Expertos señalan que mientras el cierre físico de oficinas legislativas es meticuloso, el patrimonio digital de los políticos muertos queda abandonado, expuesto a usos inapropiados o ataques cibernéticos.