Gobierno boliviano admite que crisis política afecta crédito externo
Standard & Poor’s rebajó la calificación de Bolivia a «CCC-«. El Ministerio de Economía reconoce que el bloqueo legislativo y la polarización limitan el acceso a financiamiento. La salida de capitales supera los 1.337 millones de dólares en 2025.
«Política y economía van de la mano»
El ministro Marcelo Montenegro afirmó que el informe de S&P «ratifica» el impacto de la ingobernabilidad. La Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) no aprueba préstamos clave, lo que ha reducido la inversión pública. «Sin consensos, no hay estabilidad financiera», señaló el Ejecutivo.
Fuga de capitales y reservas en mínimos
Hasta abril de 2025, Bolivia registró una salida neta de 1.337 millones de dólares. Aunque el Gobierno pagó el 38% de la deuda externa programada (585 millones), las reservas internacionales están en niveles históricamente bajos. El dólar paralelo sigue al alza, agravando la vulnerabilidad económica.
Un diagnóstico compartido
S&P advirtió que la pugna interna en el MAS y la oposición obstaculizan la respuesta a los desequilibrios. El Gobierno mantiene diálogo con organismos multilaterales, pero la falta de acuerdos políticos sigue siendo el principal escollo para acceder a financiamiento.
De la negación al reconocimiento
Bolivia arrastra tensiones políticas desde 2020, pero esta es la primera vez que el Ejecutivo vincula el bloqueo legislativo con el deterioro crediticio. La calificación «CCC-» de S&P refleja el riesgo creciente de impago y aislamiento financiero.
Un camino cuesta arriba
La admisión oficial confirma que la estabilidad macroeconómica depende de acuerdos políticos. Sin ellos, el acceso a créditos externos y la capacidad de inversión pública seguirán comprometidos, según analistas y el propio Gobierno.