Candidatos opositores se acusan por antecedentes penales de familiares
Unidad y Libre intercambian denuncias sobre vínculos con narcotráfico y fraude bancario. La candidata María Beatriz Robledo renunció tras conocerse la condena de su padre en EE.UU. Los ataques ocurren a cinco meses de las elecciones que definirán al sucesor del MAS.
«¿De dónde viene la plata para la campaña?»
Alejandro Reyes, candidato de Unidad, acusó al vicepresidente de Tuto Quiroga de ser hijo de un investigado por el Banco Fassil: «Muchas familias sufren por esos ahorros no devueltos». Tomás Monasterios, vocero de Libre, negó vínculos de su candidato con el caso y retó a Samuel Doria Medina a explicar la candidatura de Robledo.
Renuncia y réplicas
Robledo presentó su declinatoria tras confirmarse la sentencia por narcotráfico de su padre. Monasterios exigió que, si se comprueban sus acusaciones, «Samuel debería declinar su candidatura». Ambos partidos lideran las encuestas pese a los escándalos.
Opositores en guerra interna
Unidad y Libre, principales fuerzas opositoras al MAS, intentaron sin éxito formar un bloque único. Las acusaciones mutuas reflejan la fractura en la oposición tras 20 años de gobierno masista. Las elecciones de 2025 marcarán un punto de inflexión en la política boliviana.
El peso de los antecedentes
El Banco Fassil quebró en 2019 dejando pérdidas por 400 millones de dólares, mientras el narcotráfico sigue siendo un tema sensible en Bolivia, país productor de coca. Estos casos resuenan en una campaña donde la oposición promete «transparencia».
Elecciones bajo la lupa
Los incidentes tensionan el proceso electoral en un escenario polarizado. La credibilidad de los candidatos y el manejo de estos casos podrían definir el voto ciudadano.