Evo Morales reclama su derecho a ser candidato pese a inhabilitación
El expresidente asegura liderar las encuestas aunque no figure como postulante. Morales se autodenomina «el político más traicionado» y mantiene contactos con partidos para las elecciones de agosto, a pesar del fallo del Tribunal Constitucional que lo excluye.
«¿Qué democracia es esta si Evo no es candidato?»
En su programa radial Kawsachun Coca, Morales cuestionó el sistema electoral boliviano: «Los votos indecisos son míos», afirmó, atribuyéndose apoyo popular pese a su exclusión legal. Criticó a antiguos aliados del MAS y a Andrónico Rodríguez, a quienes tachó de «oportunistas sin vuelo político».
La batalla legal y los contactos políticos
El líder cocalero insiste en su habilitación como «derecho de los electores», aunque el Tribunal Constitucional Plurinacional lo inhabilitó para otro mandato. Reveló que 6 partidos visitaron el Chapare y 3 más lo contactaron desde La Paz, pero denunció presiones contra ellos: «Les amenazan con persecución».
Raíces de una fractura
Morales, presidente entre 2006 y 2019, enfrenta desde 2020 una crisis con el MAS, partido que fundó. Su «antiimperialismo» y conflictos internos llevaron a la ruptura con figuras clave. La actual Asamblea Legislativa, según EL DEBER, muestra fragmentación y deslegitimación, agravando el escenario electoral.
Un ampliado como respuesta
Morales anunció la organización de un nuevo encuentro con sus bases: «No vamos a abandonar». Su estrategia se centra en movilizar apoyo popular mientras busca vías legales para participar, aunque sin partido registrado ni aval institucional. Las elecciones de agosto definirán el peso real de su influencia.