EEUU bombardea tres instalaciones nucleares iraníes
Trump anuncia el ataque a las plantas de Fordow, Natanz y Esfahán. La acción militar, ejecutada el 21 de junio de 2025, marca la mayor intervención estadounidense contra Irán en la historia reciente. El presidente asegura que los aviones regresaron «a salvo» tras la operación.
«Ataque exitoso» con bombas de 30.000 libras
Donald Trump confirmó en Truth Social que EEUU utilizó «una carga completa de bombas» en Fordow, una instalación subterránea blindada. «Todos los aviones están de camino a casa», declaró. El Pentágono aún evalúa los daños, pero solo los bombarderos furtivos B-2 de EEUU pueden transportar ese armamento.
Escalada militar en Oriente Medio
EEUU desplegó en las últimas semanas escuadrones de cazas F-16, F-22 y F-35, además de dos portaaviones hacia la zona. Un funcionario del Pentágono admitió preocupación por el «impacto en la preparación militar» si las tropas permanecen demasiado tiempo en la región. Actualmente hay 40.000 soldados estadounidenses desplegados, incluidos 2.500 en Irak.
Diplomacia fallida y riesgos de represalia
Trump dio 48 horas a la diplomacia antes de actuar, pero las negociaciones en Europa fracasaron. Expertos como Bilal Saab (exPentágono) advierten: «Ahora esperamos la retaliación iraní». El analista Jonathan Panikoff alerta sobre una «espiral escalatoria» que dependerá de la reacción del líder supremo Ali Khamenei.
Una década de tensiones nucleares
Irán ha desarrollado su programa nuclear pese a sanciones internacionales. Fordow, construido bajo una montaña, era considerado inexpugnable hasta este ataque. Israel presionó a EEUU para intervenir tras sus propios bombardeos a instalaciones iraníes semanas antes.
Un punto de inflexión geopolítico
El ataque redefine la doctrina «America First» de Trump y podría dividir a su base electoral. Mientras think tanks como el Cato Institute lo califican de «desastre», exfuncionarios como Dana Stroul destacan que «Trump cambió el cálculo de riesgo» ante la negativa iraní a negociar.