Europa intenta evitar que Trump bombardeé Irán en plena guerra con Israel
Alemania, Francia y Reino Unido negocian con Irán en Ginebra para frenar una escalada militar. La UE busca una salida diplomática antes de que EE.UU. decida en dos semanas si ataca instalaciones nucleares iraníes. Trump mantiene la puerta abierta a negociaciones.
«Una carrera contrarreloj para evitar la catástrofe»
Los ministros de Exteriores de Alemania, Francia y Reino Unido —junto a la alta representante de la UE, Kaja Kallas— se reunirán este viernes en Ginebra con el canciller iraní Abbas Araghchi. El objetivo: lograr garantías de que Irán limitará su programa nuclear a fines civiles. La reunión ocurre tras una semana de guerra abierta entre Israel e Irán, con Netanyahu presionando a Trump para que intervenga militarmente.
El dilema europeo
Europa «arrastra una debilidad histórica» en esta crisis, según el texto. A diferencia del acuerdo nuclear de 2015 (JCPOA), donde los llamados E3 tuvieron peso, ahora Trump ha marginado su influencia. Un diplomático europeo anónimo señala que «hay algo que frena a Trump: su aversión a la guerra», pero advierte que el presidente estadounidense podría ordenar bombardeos con «artillería antibúnker» en dos semanas.
Las presiones cruzadas
Israel exige a Europa que transmita a Irán un mensaje contundente: «desmantelar su programa nuclear, misiles y financiación a grupos armados». Mientras, Francia intenta mediar, con su ministro Barrot destacando que Irán está «dispuesto a negociar» si hay alto el fuego. Reino Unido, por su parte, balancea entre apoyar a EE.UU. y evitar una guerra regional.
Cuando la sombra de Obama persiste
La crisis evidencia cómo Trump desmanteló el legado diplomático de su predecesor. Tras retirar a EE.UU. del JCPOA en 2018, Europa perdió capacidad de mediación. Ahora, con Netanyahu ignorando llamados a la moderación y Trump fluctuando entre amenazas y aperturas, la UE juega con cartas débiles. Analistas como John Sawers (exjefe del MI6) creen que Trump «preferiría no estar en esta guerra», pero podría verse arrastrado.
Dos semanas que pueden cambiar el mundo
El margen para evitar una escalada es estrecho. Aunque las conversaciones en Ginebra difícilmente cerrarán un acuerdo, podrían servir para que Trump justifique no atacar, satisfaciendo a su base más pacifista. Pero con Israel presionando y la volatilidad del conflicto, la ventana diplomática podría cerrarse tan rápido como se abrió.