Gobierno boliviano rechaza informe que lo sitúa como el más corrupto de Latinoamérica
La ministra de Justicia calificó el estudio del WJP como «unilateral». Bolivia ocupa el puesto 141 en el Índice de Estado de Derecho, solo por encima del Congo. El Ejecutivo defiende sus avances en transparencia y lucha anticorrupción.
«Datos sin fundamento», según la ministra Saravia
Jessica Saravia, ministra de Justicia, afirmó que el informe del World Justice Project (WJP) «no refleja la realidad» del país. «No aceptamos informes unilaterales que nunca preguntan al Estado», declaró durante una conferencia de prensa. El estudio sitúa a Bolivia con una puntuación de 0.23, igual que Haití y Camboya.
Argumentos del Gobierno
Saravia destacó que el Viceministerio de Transparencia tramita más de 900 causas por corrupción y que en el primer semestre se lograron «más de 50 sentencias». Además, mencionó que la OCDE evaluó positivamente los esfuerzos del país en esta materia.
Contenido del informe
El WJP coloca a Bolivia por debajo de Venezuela (puesto 136) y México (135) en su ranking. La ministra insistió en que el Gobierno trabaja en «transparencia, capacitación de funcionarios y acceso a la información».
Un ranking que duele
Bolivia aparece en el Índice de Estado de Derecho como el país con mayor percepción de corrupción en Latinoamérica y el segundo a nivel mundial, solo superado por el Congo. El Ejecutivo insiste en que esta clasificación no considera sus acciones concretas contra el fenómeno.
Entre la polémica y los datos
La disputa entre el informe internacional y la postura oficial refleja la brecha entre percepciones globales y la narrativa gubernamental. Mientras el WJP basa su evaluación en indicadores objetivos, el Gobierno boliviano enfatiza sus procesos judiciales y reformas institucionales.