UE estudia límite de donantes de esperma para evitar riesgos de consanguinidad
Ocho países proponen un tope europeo para reducir casos de hermanastros desconocidos. La medida busca regular el creciente mercado transfronterizo de gametos, ante el aumento de nacimientos por reproducción asistida. Se debatirá este viernes entre ministros de la UE.
«Evitar que medio hermanos formen familias sin saberlo»
Suecia, respaldada por Bélgica y otros seis países, impulsa un límite europeo de hijos por donante de esperma. Actualmente, los topes nacionales varían: desde 1 hijo en Chipre hasta 10 en Francia o Polonia, pero no existen restricciones para donaciones entre países. «El riesgo de problemas genéticos o psicológicos crece con la globalización de los bancos de gametos», explica Carolina Östgren, del Consejo Ético Médico sueco.
Casos que alarman
Un donante con un gen cancerígeno concibió al menos 67 hijos, 10 ya diagnosticados con cáncer. Otro caso en Países Bajos superó los 550 hijos. Suecia detectó en 2023 clínicas que exportaban esperma de un mismo donante a múltiples países, «saltándose los límites nacionales».
El negocio frente a la ética
Los bancos de esperma como el European Sperm Bank (que opera en 80 países) admiten que solo el 3-5% de los candidatos pasan los controles. Defienden que un tope muy bajo encarecería el proceso, pero Östgren rechaza esa lógica: «No podemos priorizar el coste sobre la salud». Algunas clínicas ya ofrecen donantes «exclusivos», pero a precios más altos.
El factor ADN y el anonimato
Los tests genéticos y redes sociales están permitiendo que jóvenes descubran «decenas o cientos de hermanastros», según un funcionario belga. Bélgica aboga por eliminar el anonimato de los donantes y crear un registro europeo centralizado, algo que no incluye la nueva normativa de la UE sobre reproducción asistida, vigente desde 2027.
Cuando la biología supera las fronteras
La caída de la fertilidad en Europa y el acceso a reproducción asistida (incluyendo parejas homosexuales y mujeres solteras) han disparado la demanda de gametos. La escasez de donantes locales ha multiplicado el comercio transfronterizo, con esperma de un mismo donante distribuido en varios países sin control.
Un debate que ya no puede esperar
La UE enfrenta el reto de armonizar normas dispersas mientras crecen los riesgos médicos y emocionales para los hijos de donantes. Suecia confía en que una decisión europea sirva de modelo global, dado que «el esperma se exporta a todo el mundo».